[ Fotografía ] Nuria Fontain
[ Post ] Silvia
Y Nayara Malnero, sexologa, se vino a disfrutar a Cenas Adivina. Y fue una velada fantástica donde pudimos hablar de sexo, pareja, educación y salud.
Se plantearon temas, se solucionaron dudas y nos reímos muchísimo. Es una pena que aun en este siglo todavía se haga raro hablar de sexo con naturalidad. Creo que este es el origen de muchos problemas posteriores en la intimidad de una pareja.
Yo nunca hablé con mis padres de este tema pero la verdad es que tampoco lo necesité. Ahora como madre quizá me lo plantee pero tengo que pensar bien cómo. A veces puede ser peor un intento torpe. Creo que aún tengo tiempo para pensarlo.
En cualquier caso creo que desde bien pequeños podemos ver ese ejemplo de amor y cariño. Yo lo viví con mis padres que continuamente se hacían carantoñas y se miraban con una intensidad… Yo quería eso, no sabía muy bien que significaban pero para mi eran un ejemplo de complicidad absoluta.
Me acuerdo que cuando estábamos en «la finca» que teníamos piscina, nos mandaban a poner secos antes de comer y mi padre decía » y esperáis en la mesa que tu madre y yo vamos a darnos un bañito en la piscina solitos y le guiñaba un ojo». Señores allí había química de la buena y además ahora recuerdo las risas añadidas de mis hermanos mayores cuando se iban ese rato solitos. Seguramente era su rato de estar solos sin 9 niños alrededor tirándose a bomba y gritando. El momento de recuperar el 1 + 1 = 2
Yo lo que aprendí es la magia de conseguir siempre una parcela de intimidad, una complicidad compartida, un ratito de cariño y amor para ellos dos solos. Y a mi, que mis padres se hayan querido tanto, me ha afectado absolutamente para bien. Ha resultado que mi marido es como mi padre en ese sentido, además de tener muchas otras cosas en común y mi vida sinceramente está llena de miradas y carantoñas y a veces hasta me da la risa de recordarlos a ellos y entender por fin tantas cosas.
Entender tu disfrute vinculado con el disfrute de tu pareja creo que es la clave para que en el terreno de la intimidad la cosa funcione. Yo disfruto, él disfruta y todos disfrutamos porque señores es un tema que si está bien afecta muy positivamente a la familia y a cómo eres con el resto del mundo. Valdrá la pena entonces informarse sobre los cuerpos de hombres y mujeres para saber cómo disfrutar más de esta parte importante en la vida en pareja?
Las mentiras solo hacen daño a este respecto y no van a ninguna parte pero a veces nos mentimos incluso entre nosotras! Con lo fácil que sería poder decir con naturalidad que si el «misionero» no termina de convencerte quizá debas buscar el clítoris desde otra perspectiva.
Si disfrutas querrás más y más, sino empezarán los pensamientos sobre pintar el techo de azul y cada vez serán menos..
La generosidad en el sexo es fundamental. Disfrutar juntos es el gran orgasmo. Y conocernos bien el primer paso para lograrlo.
Una de nuestras invitadas de esta noche, María, os cuenta su experiencia en su segunda Cena Adivina.
Continúa aquí el post de María.
Gracias a todos los que os vinisteis a disfrutar de una noche fantástica! Especialmente a Nuria por estas bonitas fotos de recuerdo y a Nayara por su gran generosidad, sonrisa y amabilidad constantes!
Más disfrutar y menos vergüenzas absurdas!
Silvia
Un comentario
Me ha encantado leer y recordar la velada. Fué genial compartir con vosotros!
Me ha gustado muchísimo tu reflexión y esa anécdota sobre tus padres, tomo nota!!
Solo una anotación: a la hora de hablar con los hijos, mejor el intento torpe que el no intento.
Un abrazo enorme para ti, tu preciosa familia y tu espectacular equipo Silvia.