Eva y yo nos conocimos gracias a Beatriz Millán. Hablando de partos, emociones y respeto. Entendí todo cuando descubrí sus fotos de nacimientos, me emocioné hasta las lágrimas y he deseado aun con más ganas el cuarto hijo solo por tener la oportunidad de ver a Iñigo y a mi misma en uno de los momentos más importantes de nuestra vida. De momento me tendré que conformar con las fotozas que me ha dejado de todas las veladas a las que ha venido. Le cuesta seleccionar y a mi aún más porque son todas dignas de enmarcar. Ves las fotos y dices ¿pero cómo ha podido captar el sentimiento de todos los momentos vividos? ¡si están todos!, los que recordaba y los que no. Una pasada, yo ya le daba el premio más grande que haya.