Conocí a Isabelle en su primera Cena Adivina donde la experta era la genial Andrea Amoretti. Ese acento francés tan elegante, su serenidad y su estilo directo, resolutivo y analítico me encantó. Es una persona auténtica empeñada en que las mujeres nos quitemos los estigmas y seamos realmente libres de nuestros pensamientos, decisiones y acciones a través de su proyecto The free me project.