Andrea me presentó a Carlos, y cuando nos sentamos a tomar un café me dijo:"yo quiero cambiar el mundo", Comprenderéis que mi expectación era máxima y no me defraudo. Carlos es afable, simpático, cercano y con unas ganas enormes de aportar al mundo su granito de arena. ¡Cómo admiro a las personas que se "complican la vida" por hacer mejor la de los demás!
Tiene un proyecto entre manos que nos encantó conocer y además todos podemos ayudarle y formar parte del cambio. ¿Te animas?